Lunes, 5:10 pm. Salgo del trabajo. Me monto en mi carrito. Canto Alanis Morrisette a todo pulmón. Voy con el flujo de los carros. Extrañamente no hay casi tráfico. Me salgo de la autopista a mi zona. Empieza un poco de tráfico. En eso un motorizado me cachetea el vidrio delantero derecho. Volteo. ¡Es mi hermano! Nos saludamos. Primera vez que nos vemos coincidentemente en la calle. Le mento la madre (nuestra madre) porque él está en moto, y yo atascada en un carro. Ohh well. Sigo cantando. Lo veo que me pasa y se para y un tipo le dice algo y voltea y se regresa. What? No entendí nada. Bajo mi vidrio. "Brotheeeeeer, que rolo e tranco de teta tienes en el caucho". What? medio asomo la cabeza. La veo. Véanla por favor. Está aquí. En la fotito de abajo. Tan grande que no tuve ni que salirme del carro para verla.
Mi hermano me escolta. Dale lentico, vamos a ver si llegamos a la casa para cambiarte el caucho (yo, por dentro, seguía incrédula. Que depinga, mi caucho está a punto de explotar y tengo a mi hermano atrás escoltándome para cambiármelo). Sigo como a 20 km/hr (igual el tráfico me hubiese impedido ir a una velocidad mayor) y vamos dándole, en cada semáforo bajo el vidrio para ver si la teta sigue creciendo, o qué... Ya a 200 mts de mi casa, casi llegando a una bomba que está en todo el camino, le pregunto a mi hermano: ¿pero tu crees que llegue a la casa? ¿no será mejor pararnos en la bomba?. Mi hermano: "No vale, yo creo que llegamos a la casa mejor". Yo: "¿Tú crees?. Él: "No broother, esa vaina va explotar ya, salte salte, vamos pa' la bomba".
Nos paramos en la bomba. Me salgo del carro. Le tomamos fotos al caucho. Procedemos a abrir la maleta, en lo que mi hermano saca el cauchito de repuesto BAAAAAAAAAAAAAAAAAMMMMMMMMMMM (sonido explosivo, similar al de las bombas de Misión Imposible). Explotó el caucho. Mi hermano: cara de alivio. "MENOS MAAAAAAAL. Eso es lo que me tenía nervioso. Que me explotara esa vaina en la cara."
Jajajajajaj....
And so, God loves me, or what? Que otra explicación puede haber? Es como dice mi mamá:
Suerte N. 1: que mi hermano y yo saliéramos a la misma hora y nos topáramos en el camino. Generalmente tenemos horarios muy diferentes.
Suerte N.2: Que por obra del destino, el panita que estaba dos carros más adelante se haya dado cuenta, no de la teta porque ese tamaño creo que brincaba a la vista de todo el mundo menos yo (por despistada), si no que se haya pillado el saludo entre mi hermano y yo. Y que de ñapa, le naciera bajar el vidrio en una ciudad tan insegura, para decirle a un chico en moto "pana, ¿viste la teta en el caucho de la amiga que acabas de saludar?"
Suerte N. 3: Que la teta no haya explotado antes de llegar a la bomba.
Suerte N. 4: Que la teta haya explotado un minuto antes de que mi hermano estuviese pegado al caucho destornillándolo para cambiarlo por el de repuesto.
Cuatro suertes de esta magnitud en media hora sólo pueden ser obra de alguien: DIOS.
Y por eso: Dios me ama.
Y soy feliz.
Wohoooooooo...
8 comments:
^^ Hahahaha... Que entrada tan genial, tb se siente uno afortunado tan sólo por pasar por acá!
Ahmm y vaya que era grande esa vaina..! o.O O.o Buenas vibras y que ese Dios siga contigo! =)
Hahaha. Hijita, dicho como lo plasmaste, te ama te adora y te tiene en su mesita de noche. Menuda teta! de la que se salvaron, vos y tu hermano! Imaginate ir re rápido y que explote, te matás! Besos y seguí con la buena suerte
wow! Dios nos ama. sinceramente. Gracias a El están los dos bien ...o los tres, pues hasta a tu carrito le salió cariñito.
Besos Ani!
Miss you and your stories!
mwa!
chiqui
Tus cuentos son una vaina que no puedo pasar desapercibidos un domingo en la tarde-noche.
XOXOX !
Increible post! todo pasa por algo!
Safaste!!!
jaja xD muy padree la post para reflexionar!
¡ Absolutamente !
;-)
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